Terapia cognitivo conductual

La terapia cognitivo conductual surge de la combinación de la Terapia Conductista que se centraba en valorar los cambios respecto a nuestra conducta y la Terapia Cognitiva centrada en la modificación de pensamientos y emociones. Esta unión se debe a la necesidad que surge tras la guerra de poder paliar los síntomas traumáticos derivados, ya que el psicoanálisis no podía responder a la necesidad a corto plazo.

A lo largo de este artículo hablaremos sobre la historia de la Terapia Cognitivo conductual, en que consiste y cuáles son los ejemplos de este tipo de terapia.

Qué es la terapia cognitivo conductual

Como comentábamos, la terapia cognitivo conductual (TCC), se remonta a las décadas de 1950 y 1960, cuando varios psicólogos comenzaron a fusionar las perspectivas cognitivas y conductuales para desarrollar un enfoque terapéutico con resultados a corto plazo.

En concreto, Aaron T. Beck y Albert Ellis son figuras clave en el desarrollo de la TCC. Por su parte, Beck desarrolló la Terapia Cognitiva tras las observaciones clínicas sobre la influencia de los patrones de pensamiento negativo en la depresión. Mientras que Ellis creó la Terapia Racional Emotiva Conductual, observando la relación entre creencias irracionales y trastornos emocionales.

Por ello, la TCC es un enfoque terapéutico empleado en la formación global de psicólogos, que se basa en la idea de que nuestros pensamientos, emociones y comportamientos están interconectados y pueden influirse mutuamente. Su principal objetivo es ayudar a las personas a identificar y cambiar patrones de pensamiento y comportamiento disfuncionales que contribuyen al malestar, como la ansiedad o la depresión.

terapia cognitivo conductual

En qué consiste la terapia cognitivo conductual

Respecto a la terapia cognitivo conductual hay varios enfoques terapéuticos que se encuentran englobados en ella:

  • Terapia Cognitiva: Centrada en la identificación de patrones de pensamiento, respuestas emocionales y comportamientos distorsionados.
  • Terapia conductual dialéctica: Se centra en el abordaje de pensamientos y comportamientos, mientras facilita técnicas de regulación emocional y de relajación.
  • Terapia racional emotiva conductual (TREC): Se centra en el abordaje de creencias irracionales, facilitando la identificación y modificación de los patrones de pensamiento.

Si bien dentro de la terapia cognitivo-conductual existen diversos enfoques, todos trabajan desde una misma estructura:

Evaluación según la TCC

  1. Evaluación de la situación problema: Identificación de las situaciones, problema, y establecimiento de objetivos terapéuticos. Se emplearán entrevistas semiestructuradas y cuestionarios que permitan comprender patrones de pensamiento y comportamiento.
  2. Identificación de pensamientos intrusivos: La TCC se centra en los pensamientos automáticos y negativos que fomenten la aparición de emociones negativas y comportamientos problemáticos.
  3. Diagnóstico y propuesta de tratamiento: Al finalizar la evaluación se realizará un diagnóstico basado en el DSM5 o la CIE-10, así como una propuesta de tratamiento. Por ejemplo, en caso de que estemos trabajando con trastornos de personalidad en terapia, se le asignará un nombre en función de la sintomatología Trastorno de personalidad Límite [F60. 31]

Intervención según la TCC

  1. Reestructuración Cognitiva: Una parte fundamental de la TCC es la reestructuración cognitiva, que implica cuestionar y cambiar los pensamientos distorsionados por unos más ajustados a la realidad.
  2. Técnicas de modificación de conducta: La TCC se centra en cambiar patrones de comportamiento empleando técnicas como las aproximaciones sucesivas, la exposición gradual o la regulación emocional como formas alternativas de afrontamiento.
  3. Tareas entre sesiones: Los pacientes suelen recibir tareas para trabajar entre sesiones, tales como técnicas de relajación, registros de pensamientos automáticos o establecimiento de metas.
  4. Fin de la intervención: Para poder realizar un cierre de sesión en terapia, desde el enfoque Cognitivo Conductual, se considera necesario que los síntomas hayan disminuido en la actualidad y que los patrones de pensamiento sean menos disfuncionales.

Ejemplos de terapia cognitivo conductual

Un ejemplo de como se puede trabajar desde la terapia cognitivo conductual, en caso de una fobia a los perros, porque tiene la creencia de que los perros grandes muerden. Este miedo se ha mantenido hasta la edad adulta.

Desde la terapia cognitivo conductual, un ejemplo del abordaje de esta fobia sería:

  • Identificación del motivo de consulta: Realización de una entrevista semiestructurada y varios cuestionarios, que permitan determinar que efectivamente se trata de una fobia a los perros.
  • Psicoeducación. Informando al paciente sobre los motivos de su malestar, que es lo que lo mantiene y cuál es el tratamiento posible.
  • Reestructuración cognitiva: Gestión de los pensamientos desajustados, mediante diálogo socrático u otras técnicas, que aparecen ante esta situación, «los perros grandes muerden siempre».
  • Tarea a casa de identificación de situación, pensamiento, emoción y conducta relacionada con la situación problema.
  • Técnica de modificación de conducta, con exposiciones graduales a un perro grande. Para ello, se establecen objetivos y se entrena al paciente para que pueda conseguirlos instaurando ejercicios de respiración.

De la misma manera en que se trabaja este tipo de fobias, este enfoque también puede emplearse para el abordaje de:

  • Depresión
  • Ansiedad
  • Gestión de la ira
  • Fobias
  • Estrés
  • Ataque de pánico
  • Trastorno de alimentación
  • Adicciones

La Terapia Cognitivo-Conductual es un enfoque terapéutico ampliamente utilizado debido a la eficacia a corto plazo. Fomenta el desarrollo de habilidades de afrontamiento ajustadas, que permitan un cambio positivo en su bienestar emocional y cognitivo.

Si sientes que desde el enfoque cognitivo conductual no cubre las necesidades de tus pacientes de la forma en que te gustaría. Te invitamos a que puedas escuchar nuestro podcast sobre la diferencia entre el abordaje cognitivo conductual y el abordaje integrador.

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Psicóloga General Sanitaria especializada en Trauma y Adicciones. Desde la seguridad del vínculo terapéutico nos podemos permitir mirar hacia nuestro interior, conectar con nuestras emociones y así poder entender al mundo y a nosotros mismos.

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